Con esta situación tan simple Stephenson nos adentra en concepto del Test de Turing. La prueba consiste en que un observador aislado del resto que realiza preguntas y una máquina y un ser humano las responden. El observador debe ser capaz de diferenciar a ambos y no penséis que es difícil engañarlo porque desde 1990 existe el premio Loebner con 100.000$ de dotación que hasta ahora ha quedado desierto.
¿Y esto para qué sirve? Bueno tiene bastantes aplicaciones pero para esta entrada en el blog he escogido dos. La primera de ellas es el captcha, esta palabreja esconde algo que seguro que habéis utilizado en vuestro uso de internet. Se utiliza para detectar cuando un programa, normalmente con fines maliciosos, está rellenando formularios de aplicaciones en internet. Entre las entradas del formulario se ofrece una imagen con letras tachadas, deformadas o maltratadas de todas las formas en las que a alguien se le ha ocurrido; que tendremos que rellenar para poder pasar las validaciones de la página.
La segunda va mucho más con la línea de este blog, tanto que la desarrollaré en una entrada futura. El hecho es que el Test de Turing nos permitirá detectar en qué momento se produce la Singularidad.
Nota: La imagen inicial es de la magnífica página xkcd, no he podido resistirme a incluirla en la entrada.
1 comentario:
Ni Turing ni gaitas. Llegará el día en el que los informáticos reconocereis la verdad tras los captchas: un modo de mantener a los minolles de chinos picateclas apartados del interné y el mercado de la informática occidental xD
Los captchas, gran muralla antichina xD
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